En una de esas notas llenas de cánticos, gritos y palabras inentendibles
que se hacen en las puertas de los estadios en Brasil, oí a un hincha
dar una definición sobre este Mundial de Fútbol que tras los partidos de
ayer disparó esta reflexión.
[ADVERTENCIA] No soy periodista deportivo, ni analista futbolísitico. Mi visión es ajena a la competencia. No me convierto en unitario por el fútbol. Y no me emociona la historia de los inmigrantes que vinieron a trabajar la tierra que nadie trabajaba, porque antes que ellos los originarios la trabajan (hasta que los mataron) y después de ellos los terratenientes descendientes no la trabajan, la destruyen.
Ahora sí, este es el punto:
Si
la gente sin techo propio hoy es llamada okupa, reprimida por fuerzas
de seguridad en las tomas de tierras; imagine cuál sería el titular de
los medios actuales sobre los mal llamados colonizadores. Usurparon
tierras, asesinaron a sus habitantes legítimos (aunque no hubiera leyes
escritas avaladas por La Haya), saquearon las riquezas, violaron a las
mujeres, esclavizaron a los menores, y se erigieron dueños y patrones de
todo.
América
Latina fue víctima de invasiones inglesas, portuguesas, españolas y
francesas. Hoy en nuestro continente se hablan todos esos idiomas de
manera oficial. Llegaron con sus culturas a destruir las nativas, con
sus legados a borrar todo anterior. Y con su religión, obligatoria y
única verdad absoluta del universo.
Tuvieron
resistencia. Mucha. Aunque perdieron los locales por goleada de cruces y
espadas. Acá se jugaba al Ulama, o ullamalitzli o tlatchtli, algo
similar al fútbol, más agresivo, a veces a muerte, se ponía en juego el
honor y se usaban hasta los dientes de ser necesario.
Ellos llegaron con sus deportes también, y aprendimos. Tanto aprendimos que en este Mundial se fueron España, Inglaterra, Francia y se puede ir hoy Portugal. Todos los países colonizadores.
Ellos llegaron con sus deportes también, y aprendimos. Tanto aprendimos que en este Mundial se fueron España, Inglaterra, Francia y se puede ir hoy Portugal. Todos los países colonizadores.
Decir esto es minimizar la historia y maximizar el deporte, pero la
frase me gustó como una síntesis de deseo: el hincha entrevistado del
que les hablaba al principio definió a este Mundial como "la venganza de
Tupac Amarú".
Marcelo J. Silvera
(c) Permitida la reproducción citando la fuente: (texto y link) Radio Regional 105.7 - www.radioregionalatilra.com
0 comentarios:
Publicar un comentario